La accesibilidad es fundamental para todos. En algún momento de nuestra vida vamos a necesitar alguna medida de accesibilidad:
- por ir con un cochecito de bebe, cargado con una maleta, con las bolsas o el carrito de la compra…
- por tener alguna discapacidad
- por haber sufrido un accidente y estar escayolado o con movilidad reducida
- …y en el mejor de los casos, todos cumpliremos años y necesitaremos espacios y servicios adaptados a nuestras condiciones.
Podemos implementar medidas de accesibilidad en nuestra ciudad, edificio o local, pero hay un tema muy importante que no se nos debe olvidar: la cadena de accesibilidad.
Su definición es: “el conjunto de elementos que, en el proceso de interacción del usuario con el entorno, permite aproximarse, acceder, usar y salir de todo espacio o recinto con autonomía, facilidad y sin interrupciones”.
Por ejemplo de nada te servirá hacer un baño accesible, totalmente equipado, pero al que se accede mediante una escalera al que no podemos llegar, o disponer plazas de aparcamiento accesibles junto a una acera con una altura tal que rompa el itinerario peatonal accesible (IPA)